El objetivo principal es conseguir un ahorro energético y económico relevante sin reducción de las condiciones de habitabilidad, seguridad y confort de los usuarios y profesionales del Complejo Hospitalario. Mediante la mejora de la eficiencia energética se alcanza una reducción de la energía primaria consumida.
Para conseguir dicho objetivo se realizan una serie de actuaciones en distintas instalaciones:
Dichas medidas de ahorro energético pueden ser extrapolables a otras instalaciones de centros hospitalarios con similares características.
Consumos de energía térmica obtenida a partir de gas natural. (kWh)
Consumo de energía eléctrica. (kWh)
Emisiones de gases de efecto invernadero. (Tn Co2e)
Esta propuesta está dirigida a todos los servicios cuya actividad se lleva a cabo dentro de las instalaciones del Complejo Hospitalario.
Los pacientes y trabajadores relacionados con la actividad sanitaria del complejo en un primer término, así como la sociedad en general, se ven beneficiados de la mejora en las condiciones de habitabilidad, seguridad y confort.
Las emisiones de gases de efecto invernadero están directamente relacionadas con factores de riesgo ambientales como la contaminación del aire, del agua, el suelo o la radiación ultravioleta.
Entre estos factores destaca la contaminación del aire, la cual aumenta la morbilidad en accidentes cerebrovasculares, cánceres de pulmón y enfermedades respiratorias crónicas y agudas. Por lo tanto, la descarbonización de las actividades de las instituciones sanitarias provocará la disminución en la ocurrencia de estas enfermedades y una mejora en la salud.