El proyecto “Hospital sin papeles” nace en 2019, durante el proceso de reflexión estratégica y se concreta con la definición del Plan RS en 2020, para impulsar el ahorro y uso eficiente del papel, como recurso natural, contribuyendo de esta manera a reducir las emisiones de GEI a la atmósfera y el alcance 3 de la huella de carbono del hospital.
Desde entonces, anualmente se definen e implementan diferentes acciones, y se realiza control de indicadores para evaluar los logros y proponer mejoras.
Las acciones realizadas han sido:
Además, se han implementado otras acciones para reducir el consumo de papel de un solo uso:
Todas estas acciones además de recudir el uso de papel, han permitido mejorar la eficiencia de los procesos, el eliminar tareas de no valor tras conocer las necesidades de los profesionales para que la alternativa a la impresión facilite la tarea y les permita liberar tiempo que puedan dedicar a cuidar a los pacientes, contribuyendo a mejorar la satisfaccion tanto de profesionales, como de pacientes.
Las acciones que se han realizado en este proyecto (todas o en parte) pueden ser fácilmente replicables por cualquier entidad, en función de sus posibilidades y recursos.
Cada organización, puede seleccionar e implementar las acciones que considere acordes a los recursos disponibles. En caso de no disponer de presupuesto, siempre puede empezar revisando “¿qué se puede dejar de imprimir?” y siendo creativos en los cambios, utilizando recursos gratuitos o ya disponibles en la organización y fomentando la participación de las personas para que trasladen sus necesidades y aporten ideas. Las acciones modestas también contribuyen positivamente y no siempre las que requieren más presupuesto ofrecen mejores resultados.
El proyecto se ha dirigido de forma global a todo el hospital.
Los profesionales del hospital es el público que se ha visto afectado de forma más directa por este proyecto. Dado que las medidas se han desplegado por toda la organización, tanto los servicios asistenciales (p.e farmacia, admisión, hospitalización, diálisis, salud bucodental…) como los departamentos de apoyo (p.e. RRHH, informática, contabilidad, docencia, compras…) se han visto afectados. Igualmente los cambios de equipamiento no se han concentrado en una unidad en concreto, sino en el hospital en su globalidad.
Algunas de las actuaciones (p.e. encuestas, pantallas en zonas comunes,etc) , además, van dirigidas y por tanto impactan en nuestros usuarios (pacientes y familiares) por lo que se considera parte del público afectado.
Además, dado que el desarrollo de algunas acciones ha requerido del trabajo con aliados, también los proveedores con los que se ha colaborado y nuestro principal cliente (Servicio Aragones de Salud), se han visto afectados.
La reducción del uso del papel, como recurso renovable, contribuye a la reducción de emisiones del alcance 3, lo cual impacta directamente en el ODS 13 (acción por el clima), y también en el ODS 12 (consumo responsable). Es una forma de minimizar el impacto que el hospital provoca, durante el desarrollo de sus actividades, y contribuir de esta forma a evitar el cambio climático.
Dado que la salud de las personas está influida por las condiciones del medio ambiente, cualquier proyecto que minimice las emisiones supondrá una mejora en la salud de las generaciones presentes y futuras.