La dispensación de medicamentos desde el Sº de Farmacia a pacientes ingresados en las unidades de hospitalización supone una actividad diaria fundamental para garantizar un suministro correcto y seguro de medicamentos prescritos por los facultativos responsables. La complejidad del proceso es alta puesto que las prescripciones cambian a lo largo del día para adaptarse a las necesidades terapéuticas y hay ingresos nuevos a diario.

Recientemente, el Sº de Farmacia ha realizado un análisis del circuito de dispensación de medicamentos con metodología LEAN y asesoría externa con la empresa AIRBUS buscando la mejora del proceso. A raíz de esto, con el apoyo de la Dirección Médica del Hospital y de la financiación del proyecto de renovación tecnológica del Sº Madrileño de Salud, ha sido posible modificar el sistema de distribución en dosis unitarias por la implantación de Sistemas Automatizados de Dispensación de Medicamentos (SADM) en las unidades de hospitalización.

Con el sistema anterior era necesaria la preparación en bolsas de plástico de un solo uso para cada paciente de cambios de tratamientos y nuevas prescripciones de ingresos. La implantación de SADM facilita el acceso directo en la unidad a los nuevos tratamientos, reduciendo su dispensación en bolsas.

Además, los medicamentos que previamente eran solicitados por stock desde las unidades a la Farmacia han sido incluidos en los SADM. Esto evita también su dispensación en bolsas.

Este proyecto busca comparar el impacto en la huella de carbono conseguido con la reducción de bolsas de plástico en la distribución de medicamentos antes y después de la implantación de SADM en unidades de hospitalización.

Para la distribución de nuevos tratamientos, antes de la implantación de SADM se utilizaron 5.939 bolsas y tras la implantación 2.749 bolsas. Reducción de 3.190 bolsas (kgCO2=0,43). Para la distribución de medicamentos en stock, antes de la implantación se consumieron 918 bolsas y tras la implantación 241. Reducción de 677 bolsas (0,21 kgCO2). En total, se han reducido 3.867 bolsas, equivalentes a 0,63 kgCO2. Por tanto, la reducción anual prevista es de 2,54 kgCO2 evitados en la gestión del residuo de las bolsas. Teniendo en cuenta también el impacto de la fabricación de bolsas, el resultado total sería una reducción anual entre 240,96 kgCO2 y 421,88 kgCO2

Se estudió un periodo de 3 meses posterior a la implantación y se comparó con ese periodo del año previo en las 6 unidades en las que se implantaron SADM. Se analizó la reducción de bolsas preparadas suponiendo que los nuevos tratamientos de un paciente se agrupaban en 1 bolsa y se utilizaba una bolsa por petición de medicamentos de stock.

El impacto en la huella de carbono se calculó midiendo el peso medio de una bolsa de plástico para convertirlo en kgCO2.

- Reducción del número de solicitudes de medicamentos para pacientes ingresados en unidades con SADM y preparadas en bolsas de plástico desde el Sº de Farmacia.

- Reducción del número de medicamentos solicitados por stock y preparados en bolsas de plástico.

- La iniciativa se dirige a las unidades hospitalarias donde han sido instalados SADM y al Servicio de Farmacia de forma directa.

La implantación del SADM en las unidades de hospitalización reduce el consumo de bolsas de plástico para la dispensación de medicamentos reduciendo así la huella de carbono.

Esta iniciativa va dirigida a la mejora del objetivo de desarrollo sostenible (ODS) número 14: vida submarina que pretende conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos. La contaminación marina está alcanzando niveles extremos y el plástico es el tipo de desecho marino más dañino. Cerca del 89 % de los residuos plásticos encontrados en el fondo de los océanos son artículos de un solo uso, como bolsas de plástico.

La salud de los océanos está intrínsecamente ligada a la nuestra. La Organización Mundial de la Salud propone el término One Health para describir el principio que reconoce que la salud humana, la salud animal y la salud del medio ambiente están interconectados. El objetivo es que la salud pública, la Medicina, la sanidad, la veterinaria y las ciencias ambientales, junto con otras disciplinas, trabajen de manera conjunta para defender una única salud.

Además, la biodiversidad marina ofrece oportunidades muy importantes para la industria farmacéutica. Los resultados del proyecto MAREX, destinados a se investigaron nuevos compuestos presentes en productos naturales procedentes de organismos marinos, confirmaron la importancia de utilizar productos naturales marinos como punto de partida para el descubrimiento de nuevos fármacos.