Para mostrar el compromiso que tiene el Servicio Galego de Saúde contra el cambio climático, queremos proponer el Área Sanitaria de Ourense (ASOU) como candidata por las siguientes razones:
Recientemente se ha realizado la instalación, o en su caso sustitución, de equipos de climatización mediante nuevos sistemas de aerotermia. Este equipamiento se caracteriza por una alta eficiencia energética, ahorrando más de 19 toneladas de CO2 y aumentando la comodidad climática para casi medio millón de actos asistenciales al año.
El ASOU también participa en el proyecto LIFE RESYSTAL, al que contribuye con sus tres hospitales. Este proyecto cofinanciado por la UE trata de abordar desde múltiples ámbitos el cambio climático para los sistemas sanitarios. Para ello, se construirán distintas infraestructuras en los tres hospitales: pérgolas verdes, recogida y almacenamiento de aguas pluviales para riego, y cubiertas vegetales. El proyecto también implica la monitorización de las mejoras y el análisis de los obstáculos que aparecen a la hora de tomar medidas climáticas en el sector sanitario.
Además, desde 2021 el ASOU realiza el cálculo de la huella de carbono con distintas herramientas gracias a su membresía en la asociación Health Care Without Harm, orientada a la reducción del impacto climático de los sistemas de salud. En el último año, se han utilizado nuevas herramientas estadísticas para calcular cuestiones de gran complejidad como la movilidad de pacientes. Esto ha mostrado que representan un alto porcentaje de las emisiones, aumentando nuestro conocimiento para implementar nuevas medidas.
Por otra parte, los nuevos vehículos arrendados por el ASOU son 100% híbridos, lo que paulatinamente reducirá la huella de carbono gracias a su progresiva sustitución. Actualmente, 15 de 34 vehículos ya suponen una reducción anual de entre 18 y 34,5 tnCO2. Además, se han instalado puntos de carga para vehículos eléctricos en el Hospital Universitario de Ourense.
Este centro dispone además de placas solares fotovoltaicas dispuestas por el tejado de sus edificios. En 2022 estas placas evitaron las emisiones 9,5 tn CO2. Además, el centro hospitalario también genera casi dos millones de kWh térmicos gracias a sus dos calderas de biomasa, reduciendo las emisiones en casi 600 toneladas anuales al sustituir equipos de gasóleo. Asimismo, también se dispone de un sistema de cogeneración de alta eficiencia.
La sustitución de equipos de calefacción por aerotermia son fácilmente replicables en centros de salud de tamaño medio. Es particularmente interesante en aquellos lugares con equipos de baja eficiencia (como calefactores eléctricos) o antiguos. La solar fotovoltaica es interesante en centros grandes con orientación sur, o del suficiente tamaño como para integrar la fotovoltaica en la instalación eléctrica. En caso contrario, existen alternativas como la térmica o la instalación eléctrica aparte (calentando ACS con intercambiador de calor).
La sustitución de vehículos es particularmente implementable en aquellas organizaciones que deben prestar servicios a larga distancia, como Atención Primaria o aquellos hospitales que dispongan de un servicio de hospitalización a domicilio. La instalación de puntos de carga eléctricos, por el contrario, es muy sencilla en hospitales o lugares con aparcamiento propio.
Consumo de electricidad anual por acto asistencial para cada centro de salud (kWh/acto asistencial). En CO2e, 19 toneladas. Emisiones de los coches pertenecientes al SERGAS (combustible/vehículos), del cual se deriva el CO2 (18 tnCO2e). La solar fotovoltaica supone 9,5 tn CO2e.
Estas medidas están centradas en las instalaciones del Área Sanitaria de Ourense, por lo que afectan a todo el personal y a todos los pacientes. En particular, la población de edad avanzada, que es la más vulnerable a temperaturas extremas y la que habitualmente vive en zonas rurales. Las medidas de electrificación van orientadas al personal, pues es el que dispone del aparcamiento y usa los vehículos propios. Esta última es fundamentalmente el personal de mantenimiento.
La principal mejora de la salud, aparte de los beneficios evidentes de reducir el impacto medioambiental con su pequeño pero importante impacto, es la instalación de nuevos equipos de aerotermia. Esto permitirá a pacientes, a menudo de avanzada edad, disponer de mayor comodidad térmica cuando acudan a su centro de salud. La apuesta por la movilidad eléctrica, tanto híbrida como completamente eléctrica, reduce la emisión de múltiples gases y partículas relacionados con enfermedades pulmonares. La instalación de puntos de carga en el hospital es especialmente significativa en esto, ya que a menudo acude gente con patologías previas, y es interesante tener una calidad del aire lo más alta posible.